“Examinaos a vosotros mismos si estáis en la fe; probaos a vosotros
mismos. ¿O no os conocéis a vosotros mismos, que Jesucristo está en vosotros, a
menos que estéis reprobados? -2 Corintios 13.5 RV1960
Introducción
Corinto era una iglesia fundada por Pablo en el año 50, posteriormente
en el año 54 les escribe su primera carta, y en el 57 la segunda carta. Era una
iglesia asentada sobre una ciudad muy inmoral, a tal extremo que a “fornicar”
le decían en todo de broma: “corintizar”. Esto debido a la
prostitución religiosa practicada en el templo de la diosa Afrodita. Tenía un
puerto por donde pasaban gentes de toda la Cuenca del Mediterráneo, era una
ciudad comercial.
Había un templo al dios Apolo, y sacrificaban animales cuya carne
luego la vendían en los mercados. Había prejuicios en los cristianos por comer
estas carnes. Había un hedonismo incomparable y un amor por la sabiduría, en
tal sentido que los seres humanos en aquella época se –realizaban- siendo
filósofos (amor por la sabiduría).
El liderazgo de la iglesia se volvió terco y su inmadurez llevó a que
formaran partidos dentro de la iglesia. También menospreciaban a Pablo, no
reconocían su apostolado y ministerio. Había judaizantes, y falsos maestros que
enseñaban que Jesús no resucitó. Entre otras herejías. Toleraban el pecado, no
disciplinaban a los que caían en pecado. Eran resentidos, pues no les gustaba
que les llamen la atención.
Pablo los amaba, y aparte de sus visitas, les envió cartas. Esta vez,
Pablo se atreve a desafiarlos a que “evalúen
su cristianismo, quizá no son hijos de Dios, quizá no han nacido de nuevo”.
Nuestras iglesias de hoy están llenas de “cristianos no salvos”. Es la preocupación de todo pastor. Cuando
no hay santidad en una iglesia, y el pecado abunda, lo más probable es que esa
iglesia esté lleno de “Pedros y de
Judas”. Es importante evaluarnos, si no hay santidad en nuestras vidas, lo
más probable es que nunca hayamos conocido a Jesús el Mesías.
¿Qué pasaba en Corinto que fue necesaria esta exhortación de Pablo?
EL CONTEXTO de la carta nos
presenta ocho puntos (hay más) que fueron el MOTIVO por el cual Pablo manda que
los hermanos de Corinto “examinen su
cristianismo”.
1. Calumniadores contra Pablo
“ruego, pues, que cuando esté presente, no tenga que usar de aquella osadía con que estoy dispuesto a proceder resueltamente contra algunos que nos tienen como si anduviésemos según la carne.” -2 Corintios 10.2
Acusar a un apóstol, una
autoridad espiritual de la magnitud de Pablo, de “andar según la carne” es una osadía, una calumnia. Sobre todo,
cuando nunca hubo una justificación. Pablo nunca fue carnal. Su vida y
trayectoria lo demuestran. Pablo vivió como mártir, nos dejó trece cartas en el
NT y en ellas una gran revelación doctrinal que es el fundamento de nuestra fe
cristiana.
Los corintios que
calumniaban a Pablo, son tan igual como en la actualidad, los falsos hermanos calumnian a sus pastores,
por algunos errores, los acusan de carnales sin serlo. La calumnia es un pecado
grave. Si calumniaban a un apóstol como Pablo, imagínese las calumnias entre el
liderazgo y entre los hermanos de Corinto. Se necesita tener madurez espiritual
para discernir que un líder como Pablo era un apóstol “aprobado” (ver 2 Corintios 13.6)
2. Juzgaban por apariencias
externas
“Miráis las cosas según la apariencia. Si alguno está persuadido en sí mismo que es de Cristo, esto también piense por sí mismo, que como él es de Cristo, así también nosotros somos de Cristo.” -2 Corintios 10.7
Los hermanos de Corinto
tenían un proceder, un juicio y procedimiento en base a la apariencia externa. Es su afán por desprestigiar a Pablo, habían
llegado al colmo de establecer juicios contra los demás, sólo en base a
apariencia. Dios dijo una vez: “el
hombre mira lo que sus ojos ven delante, pero Dios mira el corazón” (1
Samuel 16.7).
El juzgar a otros por su
“apariencia externa” es muestra de
inmadurez, de ausencia de espiritualidad. Muestra de carnalidad, de gente
que no ha nacido de nuevo.
3. Jactancia del Liderazgo
“Porque no nos atrevemos a contarnos ni a compararnos con algunos que se alaban a sí mismos; pero ellos, midiéndose a sí mismos por sí mismos, y comparándose consigo mismos, no son juiciosos”. - 2 Corintios 10.12
La jactancia es insensatez. “Porque
no es aprobado el que se alaba a sí
mismo, sino aquel a quien Dios alaba.” (10.18). Proverbios 27.2 dice: “Alábete
el extraño, y no tu propia boca; El ajeno, y no los labios tuyos”.
La jactancia es un pecado de
alguien que su nivel espiritual no es mayor que la de un neófito.
4. Seguían a Falsos Maestros
“Pero temo que como la serpiente con su astucia engañó a Eva, vuestros sentidos sean de alguna manera extraviados de la sincera fidelidad a Cristo. Porque si viene alguno predicando a otro Jesús que el que os hemos predicado, o si recibís otro espíritu que el que habéis recibido, u otro evangelio que el que habéis aceptado, bien lo toleráis.” -2 Corintios 11.3-4
Pablo arremete contra
hermanos que “prestan oídos” a otro
evangelio. Todo lo que no está en la Biblia, son doctrinas de hombres.
Mayormente son doctrinas basadas en textos fuera de contexto, por ello “parece” bíblico, pero no lo es. Pablo
les advierte que el mismo Satanás se disfraza de “ángel de luz” para engañarles.
Antes del año 100 d. C.
Había 20 herejías que rondaban en la Iglesia cristiana. No una ni dos sino veinte.
Había falsos maestros en Corinto que enseñaban que “no hay resurrección” y otros decían “que para ser salvo, aparte de creer en Jesús se tiene que guardar la
ley judía”.
Si hacemos una lista de las
herejías que hoy se dan en las iglesias evangélicas, nos asustamos: Pablo le
dijo a Timoteo (2 Ti 4.1-5) “se amontonarán maestros conforme a sus
propias pasiones”. Nunca hubo tantos maestros juntos, que enseñen lo
que satisface a los oídos, como ahora. Esto es casi como lo dicho por los
israelitas en el desierto “hagámonos dioses
que vayan delante de nosotros”. Aquí los temas actuales:
o El tema del éxito: “descubre el campeón que hay en ti”
o El tema del bienestar y la salud: “todos los cristianos deben ser sanos”
o El tema de la prosperidad económica: “todos deben ser prósperos”
o El tema de la conquista: “arrebatar tus bendiciones”, “arrebatar el reino”
o El tema místico:
“falsos rabinos judaizantes”, “gente hablando hebre-ñol: Yahoshua, El Eterno,
Elohim, Yeshua Jamashia, el Adom.”, Ana Mendez Ferrel que ve “señales en el
cielo” y le “habla a los billetes”.
o El tema del legalismo: “la religión del látigo, me someto a reglas humanas para
sentir que estoy agradando a Dios y asegurarme la salvación” (falda larga, no
aretes, pelo largo, etc.)
o El tema del viaje ancestral: “la risa santa”, “falsos éxtasis y falsos
trances”.
o El tema del reino y dominionismo:
“kingdom now”, “vivamos en el liderazgo de los gobiernos”, “para bendecir una
nación tienen que gobernar creyentes.” “todos debemos ser reyes”
o El suavizar de la predicación contra el pecado: “no
ofender al oyente”, “amamos a los gays”, “no predicaremos contra los gays”, “gracia
inclusiva: tolerancia de los pecados sexuales”.
o El tema de la comodidad: “iglesias sin reglas”, “cristianismo on-line”, “en esta
iglesia las sillas están acolchadas y sirven café o refrescos”
o El tema del relego de la Biblia: “no necesitamos mucha doctrina ni teología
basta con el Espíritu Santo.”, “la Biblia son solo principios, vivamos de las
revelaciones de ahora, de lo que Dios dice ahora”
o El tema de ver
demonios en todo lado: “sectas como Dios es amor”, “amantes de la lectura
de Rebeca Brawm”, “gente que vive en el gobierno de Satanás”, “una vez un
profeta llegó a una iglesia y profetizó que el pastor de esa iglesia anfitriona
sería el apóstol de su ciudad… no terminó de dar la profecía y ese pastor murió.
Preguntaron ¿qué pasó? Y el profeta respondió que Satanás arruinó los planes de
Dios” ¿Satanás arruina los planes de Dios?
o El tema de los
ungidos: “las maldiciones generacionales las curan los encuentros de los
pastores ungidos.”
Tenemos maestros para todas
estas herejías. Desde los más sutiles como que “todos deben ser sanos” y “el
agradar a Dios con tu vestimenta” hasta los más descarados como los pastores de
la prosperidad. “Cada comezón de oído tiene su propio maestro”
5. Eran muy TOLERANTES,
toleraban a los necios
“porque de buena gana toleráis a los necios, siendo vosotros cuerdos.” -2 Corintios 11.19
Pablo llama “necios” a los
“falsos maestros”, a los “falsos apóstoles”. Tolerar a un necio en la iglesia expone tu alto nivel de necedad. Debemos
ser INTOLERANTES con el pecado, y en particular con toda falsa enseñanza.
Estudie y escudriñe la
Biblia. Pídale a su pastor que les enseñe la Biblia exhaustivamente, para que
estén preparados contra la apostasía creciente que hay actualmente. Un jefe
flojo, tolera empleados flojos. Un padre irresponsable genera hijos
irresponsables. Y un púlpito pobre
doctrinalmente genera cristianos pobres doctrinalmente.
Dios no es ni tolerante ni
flexible. No son atributos de Dios. No confundamos misericordia con tolerancia,
ni tampoco gracia con flexibilidad. No son atributos de Dios, ni la tolerancia
ni la flexibilidad. La TOLERANCIA es un
pecado del que tenemos que arrepentirnos.
6. Abundaba el pecado entre
ellos
“Pues me temo que cuando llegue, no os halle tales como quiero, y yo sea hallado de vosotros cual no queréis; que haya entre vosotros contiendas, envidias, iras, divisiones, maledicencias, murmuraciones, soberbias, desórdenes.” -2 Corintios 12.20
Interesante lista que no
necesita comentarios, sólo implicaciones:
-
Contiendas,
pleitos
-
Envidias,
celos
-
Iras,
animosidades, rivalidades
-
Divisiones,
ambiciones egoístas
-
Maledicencias,
difamaciones
-
Murmuraciones,
chismes
-
Soberbias,
engreimiento, arrogancia
-
Desórdenes
(en los cultos ver 1 Co 14.33)
Cuando la iglesia tiene
muchos cristianos no salvos, esta
lista es común. Cuando usted ve ratas en el día, en una casa, en una ciudad o
en el campo, es porque la población ha superado el equilibrio del ecosistema de
estos animales, por ello salen en el día a buscar alimentos que ya no lo
encontraron en la noche (las ratas son nocturnas).
7. Eran Pecadores sin arrepentimiento
y reincidentes
“Que cuando vuelva, me humille Dios entre vosotros, y quizá tenga que llorar por muchos de los que antes han pecado, y no se han arrepentido de la inmundicia y fornicación y lascivia que han cometido.”- 2 Corintios 12.21
Si no hubo arrepentimiento
genuino, que es producido por la REGENERACIÓN del Espíritu Santo, entonces no
espere abandonar la práctica del pecado. Pablo deja en claro que tales cristianos
que REINCIDEN EN PECAR es porque no
son nacidos de nuevos, son cristianos no
salvos. Están en la iglesia pero no están en Cristo.
Ser nacido de nuevo, lleno
del Espíritu Santo, guiado y regenerado por el Espíritu Santo, no es cuando alguien balbucea cosas en
el culto que no se entienden, o tiembla sin control, o se cae al suelo después
de una oración, mucho menos que ría o llore. El abandono del pecado, la vida de
santidad son la mejor evidencia de la llenura del Espíritu Santo.
Los corintios eran campeones
creyendo que por la abundancia de dones espirituales que tenían era todos
espirituales. En realidad eran niños espirituales, y muchos de ellos nunca
habían nacido de nuevo. La falta de arrepentimiento es evidencia de falta de
regeneración.
Alguien que no ha nacido de
nuevo, no se arrepiente.
Se nos manda EXAMINARNOS, si
estamos en la fe
“Examinaos a vosotros mismos
si estáis en la fe”
Examinaos (peirazete). Del griego:
“peirazo”.
Significa “probar algo”, “tentar a
alguien”. “Intentar probar algo”.
La acción de este verbo involucra un sentimiento, un propósito, un deseo
emocional. Significa “poner a prueba
algo o a alguien”. Este término lleva consigo el tener sí o sí una
experiencia. Experimentar.
Éste es el llamado para
hacernos una autoevaluación. Constantemente debemos examinar nuestro
cristianismo y compararlo con las Escrituras. “Estar en la fe” significa que “Jesús
el Mesías está en nosotros”. Esto es tanto en nuestras vidas personales,
como en la iglesia.
Si Jesucristo está en
nosotros, la lista de pecados anterior no sería tan larga…
Se nos dice que es necesario
establecer si somos o no APROBADOS
“probaos a vosotros mismos”
Probaos (dokimazete). Del griego: “dokime”. También
significa “probar”, pero “probar con el propósito de establecer si
se aprueba algo o no”. Término usado en la tasación de metales. El oro o la
plata se “prueban” con ácidos y el
tasador establece luego de la “prueba”
si es el metal que refiere, o simplemente es una aleación parecida
(falsificada, pirateada). Dokime
significa en sí “ser probado y pasar la
prueba: aprobado”. Dokime se
utilizaría para certificar y autenticar algo.
PROBARSE a uno mismo es
establecer si somos o no APROBADOS. ¿Eres o no lo que dices que eres? Esa
pregunta debemos respondernos al reflexionar en este pasaje.
Se nos pregunta si estamos CERCIORADOS que Jesús el Mesías está entre
nosotros
“¿O no os conocéis a
vosotros mismos, que Jesucristo está en vosotros?”
Conoceis, reconoceis (epiginosko). Del griego “epiginosko”. Éste a su
vez viene de dos palabras: “epi”, que significa sobre, y en
este caso le da intensidad al verbo “ginosko”. Significa “tomar conocimiento”, “venir
a saber”, “entender algo totalmente
a cabalidad”, “darse cuenta de algo”.
Relación entre la persona que conoce y el objeto conocido.
1 Corintios 8.3 dice, “si
alguno ama a Dios, es conocido por Él” (ha sido conocido por Él) Este
conocimiento incluye aprobación. “Epiginosko” significa por lo tanto,
“cerciorarse”, “reconocer perfectamente”. No se puede reconocer algo que no se ha
conocido antes.
RECONOCER a Jesús significa que lo veas en tu vida HOY.
Si no lo RECONOCES HOY en tu vida, es porque nunca lo CONOCISTE. Cuando te
llaman a RE-CONOCER a un delincuente,
asesino, estafador o extorsionador; te muestran fotos de personas para que tú
lo identifiques. Y sólo podrás reconocer al malhechor si lo has visto antes
realmente, de lo contrario harás una mala acusación.
No puedes RE-CONOCER a alguien que nunca lo has CONOCIDO. Si nunca
CONOCISTE a Jesús, de seguro que nunca
lo podrás RE-CONOCER.
Se nos ADVIERTE que podríamos estar REPROBADOS, DESCALIFICADOS
“a menos que estéis
reprobados”
Reprobados, descalificados (adokimos). Proviene del griego “adokimos”, mientras que “dokime”
significaba “aprobado”, “adokimos”
significa “des-aprobado”, “reprobado”, “descalificado”. Significa también “no soportando la prueba”, “rechazado”,
“sin aprobación”. El proceso de
poner a prueba los metales como el oro o la plata solo puede dar dos
alternativas: “dokime”, esto es “aprobado”
o “adokimos”,
esto es “des-aprobado”.
La ADVERTENCIA va en el
sentido de que podríamos estar llevando un cristianismo ENGAÑANDONOS a nosotros
mismo. Pensando que eres ORO y eres simple OROPEL. Hay muchos cristianos no
salvos en nuestras iglesias, que si no se arrepienten se irán al infierno.
CONCLUSIÓN
Pablo exhorta a los
corintios debido a sus abundantes pecados y falta de arrepentimiento, evidencia
de un falso cristianismo, que se EXAMINEN y que determinen si son CRISTIANOS O
NO. Oremos como el salmista:
“Examíname, oh Dios, y conoce mi corazón; Pruébame y conoce mis pensamientos; Y ve si hay en mí camino de perversidad, Y guíame en el camino eterno.” -Salmo 139.23-24
Nuestras iglesias de hoy están llenas de “cristianos no salvos”. Es la preocupación de todo pastor. Cuando
no hay santidad en una iglesia, y el pecado abunda, lo más probable es que esa
iglesia esté lleno de “Pedros y de
Judas”. Es importante evaluarnos, si no hay santidad en nuestras vidas, lo
más probable es que nunca hayamos conocido a Jesús el Mesías. Oremos a Dios pidiéndole
que nos haga “nacer de nuevo”.
¡Dios los bendiga!