miércoles, 25 de marzo de 2015

¿Por qué soy cristiano?




Es cierto que muchos dirán que nací y crecí en un hogar donde cada domingo nuestro padre se esforzó porque participemos de una reunión con la iglesia, y desde entonces no he dado marcha atrás. Pero esas son sólo las circunstancias de mi nacimiento, de mi familia y crianza. Han ayudado en mucho para guiar mis principios y valores, pero es sólo una parte del porqué soy cristiano. 

Soy cristiano porqué Dios mismo me buscó sin descanso, a pesar de que yo tenía otro camino trazado a seguir como lo tienen los hombres y mujeres de este mundo. Él se encargó de que yo lo encontrara en el camino y lo cambió a su manera; y de no ser por aquella búsqueda sin descanso de parte de Dios, llena de gracia por parte de quién entregó su vida en una cruz, hoy estaría en un basurero con una vida malgastada y echada a perder. Por eso soy cristiano. 

No porque haya decidido por Cristo, sino porque Cristo se decidió por mí. Es gracias a la incesante búsqueda que Él hizo para encontrarme. Él hablaba constantemente a mi mente, llenándome de dudas sobre si Jesús era realmente el Mesías prometido, o simplemente un impostor. El hablaba incesantemente a mi memoria, recordándome los mártires de la historia, de los primeros años del cristianismo, de cómo fueron capaces de morir haciendo del dolor su mayor hazaña y sintiéndose dignos de morir por Cristo. 

Dios azuzaba mi conciencia, la cual me acusa de malos deseos; aquellos que suelen tener los hombres y mujeres de este mundo. Y Dios aguijoneaba mi espíritu, amplio y vacío, que desea llenarse de buenas obras para sentirse aprobado; pero consciente de la trascendencia de Dios, aunque lejos y separado de Él. Por eso soy cristiano, no porque yo le hubiese amado primero a Él, sino porque Cristo me amó primero a mí, y lo demostró muriendo en la cruz en mi lugar. Por eso soy cristiano.

0 comentarios:

Publicar un comentario